Estados Unidos. 180 min. Director: Frank
Darabont. Intérpretes: Tom Hanks, Michael Clarke Duncan, David Morse, Doug
Hutchison.
La película que os quiero acercar hoy es una
de mis favoritas, y lo es principalmente porque se salta los patrones que sigo
al ver una película y lo hace por todo lo alto. Normalmente critico las
películas que duran más de 100 minutos, a no ser que tengan algo que contar.
Esta película dura el doble y no es que se haga pesada, es que si durara otros
180 minutos más te quedarías embobado mirándola. Es de esas películas que te
enganchan totalmente y te envuelven en su ambiente, cosa que es de agradecer
porque debería pasar con todas las películas y sin embargo pasa con pocas.
Seguramente habrá personas a las cuales no les gustará la película, es lógico
en la variedad está el gusto, pero tengo muy claro que nueve de cada diez verán
en esta cinta un peliculón.
Sorprende que su director, Frank
Darabont, no se caracteriza por grandes títulos a lo largo de su
carrera, pero sin lugar a dudas esta película, sumadas a Cadena Perpetua y la serie The
Walking Dead, sin lugar a dudas compensan con creces la falta de más
títulos de renombre. Esta película, tiene también el honor de encumbrar a un
actor (ya fallecido), Michael Clarke Duncan que pese a
tener una dilatada carrera, nunca había destacado demasiado pese a ser un tío
enorme y haber participado en películas de mucho nombre como La isla, Sim City,
Street Fighter, Daredevil, el Rey escorpión, El planeta de los simios, Falsas
apariencias, Armagedon, entre otras, hace el papel de su vida en esta película
al interpretar a un recluso condenado a pena de muerte. Es una película que
seguro que saca una lagrima hasta al más machote puesto que tiene muchos
factores que ayudan a que eso ocurra.
Seguramente los fuertes de la película sean la
magnífica interpretación de un secundario que perfectamente se puede considerar
actor principal, el magnetismo de la película que engancha de manera brutal, la
gran adaptación de Darabont a la novela de Stephen
King, la cual deja en muy buen lugar. Esta magnífica película en manos de
cualquier otro director significaría su gran obra maestra, en manos de este
cineasta es más complicado afirmar eso puesto que cuenta en su carrera con la
enorme Cadena Perpetua, un film igual o mejor que este. Aunque
podríamos considerar que los dos títulos son dos enormes éxitos, yo me quedaría
con La
milla verde, principalmente porque ese director ya venía con la
etiqueta de su anterior gran éxito, y eso es difícil de igualar o superar, así
que ante la duda, yo me posiciono por lograr un éxito después de haber tocado
la cima.
Sea una o la otra, estamos ante un director
que se puede jubilar tranquilamente puesto que ha colocado dos películas inmensas
entre las más importantes. Seguro que en un top50 de películas, sus dos títulos
saldrían.
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